La salida de Bélgica Tomamos 2 vuelos: de Bruselas a Madrid, 2horas y 50 minutos; y de Madrid a La Habana, 9 horas y 50 minutos. Pero ya en el avión y a punto para despegar, el comandante avisó que habría un retraso porque había 3 pasajeros que tenían que bajar del avión por “documentación insuficiente” y había que descargar TODO el equipaje del avión para buscar las maletas de los 3 pasajeros...don´t worry: el temita sólo duró una media hora. Nuestra primera casa La casa,“Greenhouse on Prado”,Calle Cárcel 158, Habana Vieja – [email protected] - +53 5 389 4652 ; a cargo de su dueño Jorge, está hubicada en la Habana Vieja, a un par de cuadras del Malecón Cubano y de El Prado (un boulevard peatonal con mucha vida: artistas, jovenes haciendo caepoeira y practicando en rollers y patinetas). Cuenta con dos habitaciones que se alquilan, un living comedor pequeño pero cómodo. Nosotros teníamos una habitación grande con una cama doble y una simple y un baño privado con agua caliente a 35 CUC la noche para los 4; y el desayuno a 5 CUC. Aparentemente, y como muchos de los servicios que ofrecen las casas particulares, todos deben cumplir unas condiciones y ofrecer lo mismo al cliente, por ejemplo en el desayuno, que es más que completo: una jarra entera de licuado de mango, un plato con fruta ( banana, mango y fruta de la pasión ), pan fresco, manteca y mermelada o dulce de guayana (en Argentina lo llamamos dulde de membrillo) ,huevos fritos o revueltos o tostados de jamón y queso, unas galletitas, café fuerte y delicioso, y leche ( no tan deliciosa...:) Desde Bélgica reservamos el alojamiento para los primeros días; allí es muy común alojarse en casas de familias , allí llamadas “casa particular”. Los cubanos alquilan un dormitorio en su casa con baño privado en general, también ofrecen desayuno y comidas. En una casa particular el trato es más personal, también es más económico y los precios se pueden hablar. Segunda Casa Particular: Javier y Yordanis En lo de Jorge teníamos una reserva de sólo dos noches porque el resto estaba todo ya reservado; pero Jorge nos consiguió otra casa muy rápidamente y a un par de cuadras de la suya, en lo de Javier: Casa Particular Javier y Yordanis, email: [email protected] Tel: (53) 7- 8606 231; Móvil: + (53) 5- 2836 814 Javier es una person muy muy amable, que no sólo nos ayudó dándonos información y buenos consejos para conocer mejor Cuba, también nos ayudó con todo lo que le pedimos, nos preparó un majestuoso desayuno,(si bien nos cobró para dos desayunos nos sirvió un desayuno para cuatro personas...o más 😊) nos ofrecía siempre licuado y café “a cuenta de la casa”; una vez estabamos ya por salir y nos llamó para ofrecernos una jarra de licuado de mango y nos dijo: “El día es largo y caluroso, beban algo”, y tomamos su riquísimo y fresco licuado de mango y luego llegó con un delicioso café 😊 La casa era un piso colonial con hermosa decoración de los años 20; parecía un pequeño museo. Javier, junto con su hijo, tienen una tienda de artesanías y juntos diseñas ellos mismos objetos únicos con cubiertos y bandejas de alpaca, como un original reloj. Tiene un living comedor amplio, un balcón con una vista muy interesante y un par de habitaciones para alquilar. La nuestra era todavía mejor que la otra casa: una habitación con baño privado y una cama doble y una pequeña cama simple, y dentro de la misma habitación había otra separada por un muro con una cama simple. Javiar nos contó como si fuera un cuento sobre la historia de Cuba y sobre el presente. Recorrido con el Hop On/Hop Off bus En el Parque Central tomamos el Hop On- Hop Off Bus (es un bus que con un ticket podés bajar en las paradas que tiene y con el mismo ticket tomar el próximo bus). Por persona cuesta 10 CUC pero cuando pregunté si los niños pagaban también, con cobraron sólo por 3 tickets. Se pasa por el Malecón; la Plaza de la Revolución; en Cementerio de Colón, con 56 hectáreas, el segundo más grande del mundo; el Acuario Nacional y los modernos Miramar y Vedado. Nosotros estábamos en la parte de arriba del bus, en el techo, y era muy divertido cuando de pronto todos gritaban :”Ramas” y teníamos que agacharnos para no chocar nuestras cabezas con las ramas de los árboles que pasaban al lado del bus. Los chicos y los grandes nos reímos mucho.
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September 2017
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